Hoy día quiero hablarte sobre competencias y habilidades para emprender, se han hecho diversos estudios analizando perfiles de empresarios exitosos que partieron de cero. De ellos e concluye que hay 3 valores que son claves y algunas conductas específicas que toda persona que desee emprender un negocio debe desarrollar.
Primero te presento las 3 C del emprendedor.
COMPROMISO de las personas con su idea de emprender. Ese demuestra a través de:
- ¿Cuál es el incentivo personal para iniciar un negocio?
- ¿Qué nivel de persistencia y dedicación tiene para emprender?
- ¿Su actitud es la adecuada? Sí se puede!
- ¿Cuánto entusiasmo, energía y pasión siente por emprender?
- ¿Cuánto tiempo y esfuerzo está dispuesto a invertir?
COMPETENCIA de las personas con su idea de emprender. Ese demuestra a través de:
- ¿Cómo la educación y capacitación del emprendedor ayuda a su negocio?
- ¿Qué nivel de experiencia tiene en administración de empresas?
- ¿Tiene algunas habilidades relacionadas con el giro del negocio?.
- ¿Tiene alguna experiencia en la industria a la que pertenece el giro?
CARÁCTER se refiere a la capacidad y disposición de una persona para identificar oportunidades, asumir riesgos calculados, y llevar a cabo acciones innovadoras con el fin de crear valor económico o social. Ese demuestra a través de:
- ¿cuán honesto es al momento de negociar o liderar su emprendimiento?
- ¿cumple a tiempo sus compromisos?
- ¿Asume riesgos calculados?
- ¿Tiene ambición para su negocios?
- ¿Se ocupa de innovar en su empresa?
Según CEFE (Competency-based Economies through Formation of Enterprise) es un enfoque de capacitación para emprendedores que se centra en el desarrollo de competencias clave para el emprendimiento, tales como la toma de decisiones, la gestión de recursos, la planificación y la resolución de problemas. El método CEFE se originó en Alemania en los años 80, como una respuesta a la necesidad de formar emprendedores capaces de enfrentar los desafíos económicos en un contexto de transición y globalización. Este estable algunas conductas necesarias para el éxito de un emprendedor:
- Iniciativa: es la capacidad de identificar oportunidades y tomar acción sin esperar instrucciones. Los emprendedores con iniciativa son proactivos y no temen dar el primer paso en la creación de un negocio o en la solución de problemas.
- Toma de decisiones: los emprendedores deben ser capaces de tomar decisiones informadas, rápidas y eficientes, basadas en los recursos disponibles, el contexto y los riesgos. Esto incluye la habilidad para analizar situaciones y evaluar opciones con una mentalidad crítica.
- Persistencia: la perseverancia es esencial para un emprendedor. Ante obstáculos, fracasos o desafíos, los emprendedores deben mantener su esfuerzo y seguir adelante con su proyecto, aprendiendo de los errores y adaptándose continuamente.
- Creatividad e innovación: es crucial la capacidad de pensar fuera de lo común, generar nuevas ideas y soluciones innovadoras para problemas, procesos o productos. Esto ayuda a diferenciar el emprendimiento y generar ventajas competitivas.
- Gestión de riesgos: los emprendedores deben ser capaces de identificar, evaluar y asumir riesgos calculados. Esto implica tener la disposición de actuar ante la incertidumbre, pero con una adecuada preparación y estrategia para mitigar posibles pérdidas.
- Responsabilidad: tomar responsabilidad por las decisiones tomadas y las acciones emprendidas es una conducta clave. Los emprendedores deben ser conscientes de las implicaciones de sus actos tanto para el negocio como para los involucrados en él.
- Visión y planificación: un emprendedor necesita tener una visión clara de lo que quiere lograr a largo plazo, y ser capaz de trazar planes estratégicos y tácticos para llegar a esa meta. Esto incluye la capacidad de establecer metas realistas y organizar los recursos necesarios.
- Flexibilidad y adaptabilidad: en un entorno cambiante, los emprendedores deben ser capaces de adaptarse a nuevas circunstancias, modificar sus enfoques y aprender de la experiencia. Esta habilidad les permite mantenerse competitivos y efectivos frente a los cambios del mercado.
- Trabajo en equipo y liderazgo: los emprendedores deben ser capaces de trabajar bien con otras personas, colaborar, liderar equipos y motivar a otros para alcanzar los objetivos comunes. El liderazgo efectivo y la capacidad de formar relaciones de trabajo sólidas son esenciales para el éxito de cualquier emprendimiento.
- Capacidad de negociación: los emprendedores exitosos son buenos negociadores. Necesitan llegar a acuerdos favorables con proveedores, clientes, socios y otros actores clave en su negocio.Capacidad para gestionar recursos: un emprendedor necesita saber cómo administrar eficazmente los recursos (financieros, humanos, materiales) disponibles para su emprendimiento, maximizando el uso de estos de forma eficiente y productiva.
Cuando pensamos en emprender después de los 50 años, hay algunas características que ponen en ventaja al emprendedor como son:
- Su mayor madurez y tiempo para dedicar a su emprendimiento.
- Tiene redes de contactos, acumulados en su vida laboral y social.
- Por su experiencia tiene una mayor capacidad de resiliencia, ya que han superado fracasos y aprendido lecciones que sirven de ejemplo para recuperarse de nuevos desafíos.
- Son más disciplinados a la hora de asumir una responsabilidad.
- Por necesidad de esta etapa de la vida, los emprendedores al llegar a los 50 años, se interesan no solo en el camino que ya han recorrido, sino también, en dejar un legado. Pasar de este mundo transfiriendo a las nuevas generaciones, obras o emprendimientos rentables para los hijos y nietos.
- Un emprendedor mayor de 50 años, pertenece a una generación que enfrentó más cambios tecnológicos, y pueden aprender a ver los cambios tecnológicos como aliados para alcanzar su propósito.
Si ahora hablamos de los grandes desafíos de emprender a los 50 o más están:
- Tener la capacidad de adaptarse a los constantes cambios del mundo actual, encontrando el equilibrio entre el trabajo y la vida personal, así como el miedo al fracaso y la incertidumbre, son retos particularmente destacados para esta generación emprendedora. En este punto cobra relevancia el establecer algunas estrategias de autocuidado como son: crear límites claros entre el trabajo y el tiempo personal, establecer rutinas y priorizar el autocuidado.
- Capitalizar la experiencia ganada en la vida para aplicarla a tu negocio es un factor diferenciador con respecto a emprendedores jóvenes, saber sacar provecho de estas habilidades y redes de contacto es la meta para un emprendedor senior.
- En una época en la que la tecnología avanza a pasos agigantados, mantenerse al día puede ser un reto para ellos. Por ello deben invertir tiempo en aprender a utilizar aquellas tecnologías que les faciliten emprender tales como: las redes sociales y gestión de datos en la nube y el marketing digital. Hay mucho material educativo gratuito en Internet y, la entrada de la inteligencia artificial que facilita en forma gratuita el acceso al conocimiento del mundo son ventajas estratégicas.
- Si enfrentas discriminación y rechazo por parte de las generaciones más jóvenes, no te detengas, recuerda que a esta edad surgen mayores cuestionamientos y arrepentimientos, pero el famoso ‘hubiera’ se convierte en el enemigo más cruel. Tienes más experiencia que ellos, y como dice el dicho “Más sabe el Diablo por viejo que por Diablo”.
- Emprender en algo que conecte tu talento, pasión de vida y propósito en el mundo, le dará una visión clara y poderosa para emprender
Emprender en la edad dorada no solo es un desafío, sino una oportunidad para transformar la experiencia acumulada en un legado que inspire a nuevas generaciones. Aprovecha tu madurez, habilidades y contactos para crear algo único y significativo, mientras sigues aprendiendo y adaptándote a los cambios.
